NUNCA TE MARCHITARÁS

si debiera describirme para que me reconozcas
podría decirte que he pulido cada uno de mis defectos
hasta hacerlos una ciencia
mis virtudes siempre fueron planetarias eso lo sabes
y mi relativa humildad es el apéndice de esta vida injusta
que me ha tocado interpretar

por lo tanto no puedo afirmar que soy feliz ni mucho menos triste
todo se resume en la rabia que me ha dado mi mayor satisfacción
que es literaria
eso me ha concedido la gran licencia y así
me exonero de los pecados al instante
porque los poetas somos un zoológico ambulante lleno de bestias
para entretener a los niños y soñar con el tiempo de la libertad
y el salvajismo
acaso no es motivo suficiente para no ir al infierno
si ya traemos cada uno el nuestro ardiendo en la lengua?

cuando era pequeño y desde un tonel conquistaba los mares
fortuna me tocó la frente hechizándome en el acto
en su príncipe esclavo que la busca afanosamente
así
fue como me encontraste en esos trabajos
un flaco héroe que tomaba demasiada cerveza y whisky
excusa suficiente para dormir todo el día y dolerme de lo que llevo dentro
que es la belleza

seguramente por eso nos gustamos porque la misma sangre se llama
éramos raros y hermosos como el astato
lanzando una gran energía que en Saturno
confundieron con la apertura del Séptimo Sello
y no era más que tu cabello furioso al viento
luchando no ser domado por esta mano
que te lamió la cabeza y el cuerpo
en aquel entonces inventé una mitología digna de Oparín
para domar tus formas ariscas a un instrumento de placer

ahora miento mejor porque he vivido más
y sé que la verdad es tan sosa como una tarde de sábado sin sexo
los hombres más divertidos somos los mentirosos
qué placer puede dar una persona que siempre dice la verdad
qué creatividad si no puede torcer ese castigo conocido como mundo?
recuerda que te hice una fantasía digna de un gobierno
y aplaudiste ebria en mi sortilegio

la pregunta que me surge no es tu paradero
tu oro yace esparcido en la profunda mar y no importa
has perdido herencias por perseguir mariposas en el campo
has dejado podrir una manzana sobre la mesa para saber
cómo serás de vieja cómo la piel te irá dejando preparándose
para ser polvo de estrellas

jamás te marchitarás bajo mis ojos
fuimos cautelosos para irnos en el momento de la hermosura
no hay poder que borre los colores en que vives tras mi cara
he soñado con la destrucción de este planeta ardiendo solitario en la nada
sólo quedará la piedra y tu
un flan nenúfar flotando en la llana oscuridad jamás
te marchitarás
te lo dijo

hay días como este que quisiera que estuvieras aquí
para darme un largo abrazo por la espalda
una sorpresa para un fantasma obsoleto muerto con tu nombre
en la bala que nunca termina de salir del cuerpo
tengo la imagen:
estoy sentado viendo la ventana con la cortina de bambú
siendo uno con la tarde y flotas por detrás ahogándome en tu cabello
las manos de tu aliento presionando mi cuello que cede
siempre cede
y yo sin prisa te digo
van varios días que no puedo dejar de escribirte
escucha conviértete en mi voz sé una conmigo escucha
que voy a leerte