miércoles, 28 de julio de 2010

LA COSTA GRANDE: PLAYA COMBUSTIBLE

Estoy parado sobre 2 millones de galones de gasolina. Es un contenedor gigantesco que se eleva sobre la playa volcánica. A un costado mío discurre el canal de agua dulce como una plegaria, hacia el mar dios de barba blanca.

Enfrente mío, los volcanes fronterizos entre la ciudad y la gran planicie sureña de Guatemala. Detrás el mar que trae en su correa transportadora, los barcos cargados de combustible.

Una garza se desprende de un manglar rumbo a nadie parte. Yo estoy trepado en un barril que me hace sentir en hombros de gigante. Ancho monstruo en silencio de rabia contenida e inflamable.

Es abrumador. Este tanque enorme a medio llenar que hace eco cada vez que doy un paso sobre su estructura. Si exploto, lo exploto. Un gran salto para un hombre y uno pequeño a la humanidad.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

¡Que poética lección de geografía nacional! Y ya sabés lo que dicen, no fumar cerca de tanques de gasolina, ni pequeños ni grandotes. Abrazos,

Trudy

Mi sitio de literatura dijo...

Guatemala con sus variados paisajes con diferencias que se divisan apoyado en los hombros del gigante de latón. Romántica vista.

Ana González Ewens dijo...

"si exploto, lo exploto"....mmmm....sería una escena interesante de ver...lástima que el gusto de explotar cosas y verlas incendiadas ya se me quitó (o no del todo creo)...pero la frase, estupenda.

Unknown dijo...

Me gusta tu humor y esas frases que paren burlonas, pero hay algo oculto .....